¿La Astrología Triunfa?
Por Jesús Gabriel Gutiérrez
La Astrología hace tiempo que está triunfando. Lo vemos en todos los avances
de las ciencias contemporáneas. Lo vemos incluso en la geología, que ya sostiene
que la vida en la Tierra está influida por las órbitas de otros planetas.
La Astrología está triunfando en el sentido de que sus principios están siendo recogidos por la física cuántica, las neurociencias, las teorías sistémicas. Quien no está triunfando es el astrólogo, el cual ha sido desplazado por todos esos supuestos avances y por todas las modas científicas de diseño, las cuales sostienen lo que los astrólogos han venido sosteniendo desde hace miles de años. Sin embargo, queridos, esto que estoy narrando ya venía siendo avisado desde la década de los 50 por la Teoría General de Sistemas y sus desarrollos posteriores.
Vivimos en la cultura del plagio y del refrito, en el que alguien crea un producto genuino y otro viene, lo patenta y se queda con toda la ganancia. Algo así nos pasa a nosotros: sostenemos con fidelidad los principios básicos de la Astrología, mientras otros que utilizan nombres muy académicamente aceptables utilizan argumentos de nuevo cuño para explicar lo que los astrólogos explican desde hace miles de años.
Dicho de otro modo: han tomado el conocimiento y lo han registrado a su nombre.
La Astrología triunfa. Los astrólogos, no.
La Astrología triunfa encarnada, aunque troceada, adoptada por otros hijos. Y esta madre que es la Astrología, de tan generosa que es, da de mamar a unos y a otros incondicionalmente.
La Astrología está triunfando en el sentido de que sus principios están siendo recogidos por la física cuántica, las neurociencias, las teorías sistémicas. Quien no está triunfando es el astrólogo, el cual ha sido desplazado por todos esos supuestos avances y por todas las modas científicas de diseño, las cuales sostienen lo que los astrólogos han venido sosteniendo desde hace miles de años. Sin embargo, queridos, esto que estoy narrando ya venía siendo avisado desde la década de los 50 por la Teoría General de Sistemas y sus desarrollos posteriores.
Vivimos en la cultura del plagio y del refrito, en el que alguien crea un producto genuino y otro viene, lo patenta y se queda con toda la ganancia. Algo así nos pasa a nosotros: sostenemos con fidelidad los principios básicos de la Astrología, mientras otros que utilizan nombres muy académicamente aceptables utilizan argumentos de nuevo cuño para explicar lo que los astrólogos explican desde hace miles de años.
Dicho de otro modo: han tomado el conocimiento y lo han registrado a su nombre.
La Astrología triunfa. Los astrólogos, no.
La Astrología triunfa encarnada, aunque troceada, adoptada por otros hijos. Y esta madre que es la Astrología, de tan generosa que es, da de mamar a unos y a otros incondicionalmente.
Así, pues, la pregunta que dejo en el aire es la siguiente:
Si un día la astrología llegara a ser aceptada en la universidad, ¿a través
de qué estas 2 vías...
...por la acción conjunta de los astrólogos ?
...o porque los académicos ven la posibilidad de hacerla suya (por motivos
económicos, por ejemplo, pues ya es sabido que las titulaciones poco rentables
las van eliminando y sólo fomentan las que dan dinero) ?
Un abrazo.
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